Hace ya una semana se dio formal inicio a la campaña política en procura de los votos para resultar electos a las posiciones en juego en las próximas elecciones congresionales y municipales. Sin sorpresa alguna he notado que el inicio particular de cada una de las campaña a nivel de las diferentes circunscripciones ha venido siendo anunciada por cada Partido con una re-edición de mas de lo mismo: Caravanas. Lo único diferente que he notado, si es que mi memoria no me falla, ha sido un llamado del Ministerio de Medio Ambiente solicitando a los diferentes responsables de tales campañas para que traten de respetar a los barrios controlando el nivel de ruidos que acostumbran a regalarnos en cada evento electoral con sus famosas “peynadoras”.
Cuando digo mas de lo mismo incluyo la algarabía y bullicio que traen consigo estos acontecimientos y que reproducen los mismos viejos letreros de: fulano el mejor, fulano el que sabe, fulano el que no sirve, etc, etc, etc. Todos mensajes repletos de vacuidad que solo contribuyen a adormecer al votante y evitar los compromisos con el mismo votante quien luego va a sufragar para elegir a quien no conoce sin saber porque ni para que.
Entiendo que seria mas interesante y aportaría mas al candidato? y a los electores?* si en lugar de estas caravanas y reuniones multitudinarias se decidieran a celebrar las llamadas reuniones comunitarias (town hall meetings) con la participación de las entidades de la comunidad como juntas de vecinos, clubes deportivos, ongs, y publico en general de manera que exista un intercambio entre los candidatos y los votantes donde los candidatos puedan escuchar las necesidades de la colectividad y la misma escuchar cual es la propuesta del candidato para resolver esos problemas. Una vez reunido el candidato con las diferentes vecindarios de su circunscripción puede tener una mejor idea de cuales son las soluciones para los diferentes avatares. Dentro de una misma circunscripción hay una complejidad de diferentes problemas con una variedad de remedios.
De la manera tradicional como llevan a cabo sus campañas , los candidatos tienen un recetario de supuestas soluciones (promesas) que nunca cumplen. Esto así porque se hacen una idea equivocada del problema y por ende de la solución y en consecuencia los problemas persisten. Si realmente los candidatos se enteraran de cuales son los problemas a lo mejor la satisfaccion de los mismos seria posible y hasta se darían cuenta de que los mismos no son tan difíciles de arreglar ni costarían tanto dinero, tiempo y esfuerzo resolverlos.
Pero parece que este no es el interés de los candidatos. Quizás es mejor no enterarse y de esa manera creer que se controla la agenda y por lo tanto son sus intereses los que predominan y no los de la gente que los envía a las posiciones. Todo esto por pensar que los fondos que se acumulan en el Estado les pertenece. Pues no, ese dinero es de los contribuyentes y el Estado su administrador y no los puede administrar como les de la gana a los candidatos, futuros representantes de sus electores. Nos llevan en “loca caravana” repitiendo como “locos” consignas estúpidas que nada significan.
La experiencia demuestra que las promesas electorales tienen un alto parecido a “la mai del play”
Cuando digo mas de lo mismo incluyo la algarabía y bullicio que traen consigo estos acontecimientos y que reproducen los mismos viejos letreros de: fulano el mejor, fulano el que sabe, fulano el que no sirve, etc, etc, etc. Todos mensajes repletos de vacuidad que solo contribuyen a adormecer al votante y evitar los compromisos con el mismo votante quien luego va a sufragar para elegir a quien no conoce sin saber porque ni para que.
Entiendo que seria mas interesante y aportaría mas al candidato? y a los electores?* si en lugar de estas caravanas y reuniones multitudinarias se decidieran a celebrar las llamadas reuniones comunitarias (town hall meetings) con la participación de las entidades de la comunidad como juntas de vecinos, clubes deportivos, ongs, y publico en general de manera que exista un intercambio entre los candidatos y los votantes donde los candidatos puedan escuchar las necesidades de la colectividad y la misma escuchar cual es la propuesta del candidato para resolver esos problemas. Una vez reunido el candidato con las diferentes vecindarios de su circunscripción puede tener una mejor idea de cuales son las soluciones para los diferentes avatares. Dentro de una misma circunscripción hay una complejidad de diferentes problemas con una variedad de remedios.
De la manera tradicional como llevan a cabo sus campañas , los candidatos tienen un recetario de supuestas soluciones (promesas) que nunca cumplen. Esto así porque se hacen una idea equivocada del problema y por ende de la solución y en consecuencia los problemas persisten. Si realmente los candidatos se enteraran de cuales son los problemas a lo mejor la satisfaccion de los mismos seria posible y hasta se darían cuenta de que los mismos no son tan difíciles de arreglar ni costarían tanto dinero, tiempo y esfuerzo resolverlos.
Pero parece que este no es el interés de los candidatos. Quizás es mejor no enterarse y de esa manera creer que se controla la agenda y por lo tanto son sus intereses los que predominan y no los de la gente que los envía a las posiciones. Todo esto por pensar que los fondos que se acumulan en el Estado les pertenece. Pues no, ese dinero es de los contribuyentes y el Estado su administrador y no los puede administrar como les de la gana a los candidatos, futuros representantes de sus electores. Nos llevan en “loca caravana” repitiendo como “locos” consignas estúpidas que nada significan.
La experiencia demuestra que las promesas electorales tienen un alto parecido a “la mai del play”
Dr. Polibio R. Diaz
Santo Domingo, R.D.
05/03/10
05/03/10
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