Me parece que es de aceptación universal acusar a los políticos de mentir copiosamente a los votantes al ofertar soluciones generales y particulares que luego olvidan y no cumplen una vez son elegidos y asumen sus respectivos cargos.
No es que yo no comparta esa idea generalizada de las falsas promesas e incumplimientos, pero también creo que cuando realmente mienten es cuando al ser elegidos y tomar posesión de sus cargos no hacen lo imposible por materializar sus promesas creadoras de expectativas que le ayudaron a usufructuar la posición.
Luego de la elección comienzan las excusas, todas iguales al través del tiempo. Vienen a la mente algunas como: lo que encontramos aquí es un desastre mas grande que el que suponíamos, las cosas han cambiado y tenemos que repensar nuestro plan e acción, no me pueden exigir eso porque los que estaban tampoco lo hicieron, no hay calidad moral para reclamarnos que actuemos de manera diferente, etcétera, etcétera.
Todos olvidan que la premisa subyacente de su elección es que ahora, cuando ganemos, sera diferente porque nosotros somos mejores que los otros y si vamos a arreglar las cosas para acabar con el hambre, las desigualdades y el desempleo.
Una vez electos comienzan a proponer proyectos de leyes que nunca antes habíamos escuchado y para los cuales probablemente ya existe una ley la cual no cumplimos y ahí si que hay maldad de verdad, porque cuando el mismo Estado es incapaz de cumplir sus propias leyes imaginate el mensaje que se le enviá a los ciudadanos. La joya mas reciente de esta corona la acaba de disparar el Superintendente de Electricidad cuando dice que la funesta CDEEE no puede pagar la compensación que por ley deben a los usuarios consecuencia de la tanda de apagones a que nos tienen sometidos. No hablemos de la asignación por ley que corresponde a Educación y los Ayuntamientos, cuyo aprovisionamiento legal es mas viejo que “raca” y nunca se han cumplido llegando el Ministro de marras a decir que el no sabría que hacer con tanto dinero.
Para completar la aberración el discursito siempre ronda la institucionalidad, el imperio de la ley, la seguridad jurídica, blablabla, blablabla pero con M. Todo para el ocultamiento y justificación de nuestra mejor amiga: Dogna Corrupción.
Para terminar quiero recordar que recientemente un amigo político me recordó que la corrupción también esta en el sector privado, a lo que respondí que si también esta en el sector privado, con un ligera diferencia, que mientras el sector privado jura proteger la rentabilidad de su inversión, el sector publico jura defender, respetar y hacer respetar la constitución y las leyes. Cuando el sector publico abandona el arbitraje para ser jugador confunde su juramento y su papel.
No es que yo no comparta esa idea generalizada de las falsas promesas e incumplimientos, pero también creo que cuando realmente mienten es cuando al ser elegidos y tomar posesión de sus cargos no hacen lo imposible por materializar sus promesas creadoras de expectativas que le ayudaron a usufructuar la posición.
Luego de la elección comienzan las excusas, todas iguales al través del tiempo. Vienen a la mente algunas como: lo que encontramos aquí es un desastre mas grande que el que suponíamos, las cosas han cambiado y tenemos que repensar nuestro plan e acción, no me pueden exigir eso porque los que estaban tampoco lo hicieron, no hay calidad moral para reclamarnos que actuemos de manera diferente, etcétera, etcétera.
Todos olvidan que la premisa subyacente de su elección es que ahora, cuando ganemos, sera diferente porque nosotros somos mejores que los otros y si vamos a arreglar las cosas para acabar con el hambre, las desigualdades y el desempleo.
Una vez electos comienzan a proponer proyectos de leyes que nunca antes habíamos escuchado y para los cuales probablemente ya existe una ley la cual no cumplimos y ahí si que hay maldad de verdad, porque cuando el mismo Estado es incapaz de cumplir sus propias leyes imaginate el mensaje que se le enviá a los ciudadanos. La joya mas reciente de esta corona la acaba de disparar el Superintendente de Electricidad cuando dice que la funesta CDEEE no puede pagar la compensación que por ley deben a los usuarios consecuencia de la tanda de apagones a que nos tienen sometidos. No hablemos de la asignación por ley que corresponde a Educación y los Ayuntamientos, cuyo aprovisionamiento legal es mas viejo que “raca” y nunca se han cumplido llegando el Ministro de marras a decir que el no sabría que hacer con tanto dinero.
Para completar la aberración el discursito siempre ronda la institucionalidad, el imperio de la ley, la seguridad jurídica, blablabla, blablabla pero con M. Todo para el ocultamiento y justificación de nuestra mejor amiga: Dogna Corrupción.
Para terminar quiero recordar que recientemente un amigo político me recordó que la corrupción también esta en el sector privado, a lo que respondí que si también esta en el sector privado, con un ligera diferencia, que mientras el sector privado jura proteger la rentabilidad de su inversión, el sector publico jura defender, respetar y hacer respetar la constitución y las leyes. Cuando el sector publico abandona el arbitraje para ser jugador confunde su juramento y su papel.
Dr. Polibio R. Diaz
Santo Domingo, R.D.
01/06/10
01/06/10
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